TRISTEZA
Habita en la cúpula amarilla del otoño
un sollozo de sándalo, un abrazo, un pétalo
de sangre interminable
cuando la esfera del ánimo se comprime
en verso y haz de sensación trabada,
cuando la luna cierne su vestigio
sobre la herida – cálido adalid de cumbre
grande− y preside incólume la revolución
y la muerte de sí misma.
Erguida daga sombría sobre vertiente
opuesta. Pira absorbida del lagar excelso.
Su expresión demudada
rechaza cualquier edulcorante de consuelo
exhumado de tintórea oscuridad.